16 julio, 2009

UNA VEZ ARGENTINA (Andrés Neuman)

El año pasado, en algunos blogs que solía leer, hubo una oleada de elogios a Neuman. Hasta ahora no he tenido tiempo de catarle pero esta semana, por fin, le ha tocado. Algunos de los elogios que leí, lógicamente, me abocaron a su vez a su lectura (vale, eso y lo guapo que me pareció) pero otros me echaron un poco para atrás por ser algo ñoños y grandilocuentes. Exactamente esos tan pedantes que se lanzan los del oficio (tanto críticos como otros escritores.)

Total, que empecé a leerlo, entre contenta de tenerlo en mis manos y recelosa de lo que me podía encontrar. En efecto, Neuman cojea un poco de ese mal que para mi gusto constituye el ser demasiado poético para la prosa. Por ejemplo, cuando se refiere a unas banderas que están ardiendo como “negros cometas de junio” o cuando utiliza el término “albiceleste” para describir un bus (yo es que tengo un trauma con determinado tipo de colores. Puede que sacado de contexto no parezca tan horrible, pero en medio de la frase a mí hizo que me diese un vuelco el corazón) por no hablar de la abundancia de personificaciones en determinados pasajes. Que, vale, cada cual tiene su estilo y en según qué tipo de historias, además, queda bastante bien. Aunque sea completamente prescindible. A lo que me refiero es que a mí esos rollos no me tiran demasiado y que en mi cabeza cuadrada no entra que se valore tanto, tanto, tanto.

Ahora bien, el libro me ha gustado. Supongo que no brilla por su originalidad en el sentido de que novelas sobre varias generaciones de una familia (tanto inventadas como no) hay unas cuantas. Pero como cada una tiene su aquel y son capaces de dar cabida a un montón de sentimientos distintos durante su desarrollo, siempre son una apuesta segura (eso lo digo ahora. A ver dentro de diez años… Intentaré acordarme de esto)

Neuman compone ésta a partir de sus propios recuerdos y de lo que le han contado tanto directa como indirectamente. Es su historia la de una familia integrada por personas que se intuyen muy autéticas (a pesar de la poesía. Algún día pagaré por estos comentarios), inmigrantes los primeros, muchos con inquietudes artísticas que se van heredando, todos en la cuerda floja de las consecuencias que arrastra la política en Argentina. Gente normal que intenta sobrevivir y llevarse bien. Unos más simpáticos, otros menos…Una novela, en definitiva, que se deja leer. No es que al terminarla me haya quedado con esa sensación de reconciliación con el mundo que se me queda a veces, pero estoy contenta de haberla leído. Y hasta puede que lea más Neuman en el futuro.

3 comentarios:

Victor dijo...

Anika, hola, yo ese libro de Neuman lo he leído (sí Bariloche, que me gustó bastante), pero sólo quería comentar que "albiceleste" es el adjetivo que suele usarse popularmente para describir la camiseta de la selección argentina, no creo que haya nada poético ahí, más bien se le da un uso periodístico a esa palabra. Bueno, sólo eso. Lo leeré y te cuento. Besos,

Víctor

Anikaa dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anikaa dijo...

¡Hola, Víctor!

Sé que se le llama así, (no sé mucho de fútbol, pero me apaño). Ya dije que es una cuestión de contexto. De todas maneras gracias por sacarme del error, si es un error, porque al final, como todo, no es más que una cuestión de gustos. Para el mío, no queda bien en ese momento y es perfectamente sustituible por algo menos rimbombante. Pero, vale, tampoco es lo más extremo, poéticamene hablando, de la novela (y creo que los periodistas no lo usan por casualidad. Pero con esto ya me estoy metiendo en un jardín que tampoco viene mucho al caso.)Simplemente fue algo con lo que me quedé porque hay toda una gama de colores a cuyo nombre soy alérgica :D

¡Cuidate!